En el segundo día de competencia de clavados, el agua de la piscina pasó de un azul turquesa a un verde esmeralda. La causa del misterio.
La diferencia puede observarse al comparar una foto del lunes con otra de hoy. O simplemente con mirar la piscina de Waterpolo de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. La tonalidad verdosa corresponde al foso de saltos ornamentales.
Para las autoridades de la organización de los deportes de piscina el trastorno obedece a la aparición de una bacteria que aunque es inofensiva para las personas es muy resistente al medio acuático. Por lo pronto, no traerá ningún tipo de problemas.